SIEMPRE SALE EL SOL

sábado, 19 de noviembre de 2011

El mar y Mario Benedetti.

El silencio del mar

El silencio del mar
brama un juicio infinito
más concentrado que el de un cántaro
más implacable que dos gotas

ya acerque el horizonte o nos entregue
la muerte azul de las medusas
nuestras sospechas no lo dejan

el mar escucha como un sordo
es insensible como un dios
y sobrevive a los sobrevivientes

nunca sabré qué espero de él
ni qué conjuro deja en mis tobillos
pero cuando estos ojos se hartan de baldosas
y espera entre el llano y las colinas
o en las calles que se cierran en más calles
entonces sí me siento naúfrago y sólo el mar puede
salvarme.













Qual è l'incarnato dell`onda?
Valerio Magrelli

¿Qué es en definitiva el mar?
¿por qué seduce? ¿por qué tienta?
suele invadirnos como un dogma
y nos obliga a ser orilla

nadar es una forma de abrazarlo
de pedirle otra vez revelaciones
pero los golpes de agua no son magia
hay olas tenebrosas que anegan la osadía
y neblinas que todo lo confunden

el mar es una alianza o un sarcófago
del infinito trae mensajes ilegibles
y estampas ignoradas del abismo
trasmite a veces una turbadora
tensa y elemental melancolía

el mar no se avergüenza de sus naúfragos
carece totalmente de conciencia
y sin embargo atrae, tienta, llama
lame los territorios del suicida
y cuenta historias de final oscuro

¿qué es en definitiva el mar?
¿por qué fascina? ¿por qué tienta?
es menos que un azar / una zozobra/
un argumento contra dios / seduce
por se tan extranjero y tan nosotros
tan hecho a la medida
de nuestra sinrazón y nuestro olvido

es probable que nunca haya respuesta
pero igual seguiremos preguntado
¿qué es por ventura el mar?
¿por qué fascina el mar? ¿qué significa
ese enigma que queda
más acá y más allá del horizonte?

3 comentarios:

  1. El mar es mi origen, mi razón de ser, de donde todo viene y por donde todo se va. Mi viento siempre viene del mar, cruza mi pequeño pedazo de tierra y vuelve al mar. Es mi frontera física y mi camino. Me encierra y me da libertad. No me hableis de montañas, selvas o desiertos, habladme del mar y seremos amigos.
    Mario.

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  2. Sólo las fotos llenan más que los poemas de Benedetti y Magrelli juntos.Son geniales.Qué envidia me dáis las personas que las "véis" antes de disparar :)

    He vivido casi toda mi vida cerca de un río y rodeado de desierto...y ahora que vivo al lado del mar, puedo decir que siento muchas de las cosas que expresan los poemicas.

    Pero sobre todo las siento porque una persona me enseñó a valorar el silencio y también a escuchar (y ver) el mar.

    Gracias (pero a tu lado)

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  3. Yo no sé que tiene que tanto engancha, pero sí sé cuánto se echa de menos cuando esta lejos.

    El olor, el sonido, el sabor a salitre, los atardeceres sentada en la arena contemplándolo durante horas viendo cambiar la luz y también el sonido y las olas...

    El mar tiene su propio lenguaje, que comprende quien lo observa a menudo, habla alto y claro, sereno...

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